Siguiendo con las señales y cómo todo fluye… Empezando el mes de Av que se conecta con el Abba (de papá), mi padre me escribió unas cartas maravillosas, amorosas y conmovedoras. La energía de mi padre escribiéndome y dándome la fuerza vital, como la del amanecer que disfruté con ese sol resplandeciente, no tiene precio.

Estamos en momentos de ya haber integrado los tres niveles, el triángulo conformado por la parte física, espiritual y mental ya en otra escala con mucha más fuerza y rapidez . Es la fuerza vital más empoderadora del año la que estamos transitando.

Observando durante dos noches el cielo, mi mirada se iba al planeta Marte, que curiosamente estaba en conjunción con mi signo: acuario. Desde mi terraza, uniendo estos dos escenarios, caigo en cuenta de la fuerza del cambio que va a venir y que los cambios van a ser muchos más rápidos y con mayor fuerza vital. Ante el ego, el aprendizaje de la humildad y dejar el control, será más ligero y así se dará en cada parcela de nuestra vida.

El optimismo, la liberación de lo que ya no funciona en nuestras vidas , el desconectar, el ser constructivo, la comunicación asertiva, estar en contacto con la naturaleza, son factores indispensables para fluir con esta energía, se trata de aprovechar esta ola y surfearla.